LA NIÑA

Se sentaba, apartada,
donde nadie le molestara,
su cuenco de leche se bebía,
desde la primera luz del día.

Unos jugando al balón,
era su pasión,
otros con la cuerda de saltar,
no dejaban de brincar,
pero ella solo bebía
y sus monólogos, hacía.

Una niña se le acercó,
y con curiosidad, le preguntó,
¿Qué estás haciendo?
una película estoy zurciendo.

Cuando abrían la cantina,
ella se iba a por su vitamina,
una caja de cereales,
para bañarlos en blancos canales,
y hacer su almuerzo
sin ningún esfuerzo.

La otra niña, se fue extrañada,
y eso no le gustaba nada,
una niña que hablase sola,
era una situación, “no me mola”.

Se lo dijo a la profesora,
que a más era su tutora,
enseguida fue a preguntar,
la misma respuesta le iba a dar.

Años mas tarde, y con su madurez,
consiguió su sueño, con testadurez,
ahora es una grande del cine español,
y aun se acuerda de ese cuenco, de ese bol,
el cual trata con cariño
y se lo traspasó a sus niños,
pues Isabel es muy inteligente,
además, de muy buena gente.

JAUME ALEGRE LASTERRA -Barcelona-