DEMASIADAS VECES

A veces, demasiadas veces,
me siento átomo del mundo,
aspiro a agrandar mi contenido.
Otras veces es el mundo lo
que me gustaría agrandar,
para que el amor que somos
capaces de engendrar, encontrara
su casa, un albergue y quizás;
un campo sin fronteras y la paz.
Soñar que mi deseo es capaz
de conseguir una sociedad
sin envidias, dónde fuéramos
capaces de compartir agua y pan.
Aniquilar la maldad, la envidia, el rencor.
Compartir mis deseos en unos versos
sin métrica, rima, estrofa o canción.
Quiero llegar a esas conciencias
encallecidas por las riquezas tiranas.
A veces, demasiadas veces,
me gusta volar sobre las conciencias…
es entonces cuando me doy cuenta,
que sueño con mucha facilidad.

Juana Campos Cortés