si traes que darles de comer a los patos, una fresca y solitaria mañana en el parque, tenlo por seguro que ellos te amarán, y si caminas, te seguirán, te convertirás de forma inmediata en su dios, ya que en ese momento tú eres su proveedor, eres su todo.
solamente te sugiero una cosa, quizá sea importante, que lleves suficiente comida para los patos, porque ellos son exigentes y siempre van a querer más, es muy probable que se cuelen dos o tres cuervos, esos pequeños pajarracos que tienen algo de traviesos y me atrevería a decir que hasta de valemadristas, pero no les pongas mucho cuidado, seguramente se están divirtiendo a costa tuya y de los patos, así suelen ser ellos.
como te decía, asegúrate de traer suficiente comida, para el tiempo que requieras estar allí, y sentirte dios, el dios de los patos en este caso, porque, si aún no es tiempo de que regreses y la comida se te acaba, los patos seguirán esperando que les des comida, recuerda, ellos siempre van a querer más, en otras palabras, no tienen llenadera, y van a graznar, primero unos cuantos, y poco a poco se les unirán los demás, y el graznido de todos juntos, no
es música para los oídos, créeme, ah, recuerdas los dos o tres cuervos, ellos, para seguir con su diversión se unirán a ese concierto desconcertante y discordante, y no sabrás qué hacer, desesperado vas a hurgar entre tu bolso para ver si por algún descuido dejaste un poco de comida, pero no, tú sabes que no fuiste descuidado, se te acabó la comida.
los patos después de unos minutos de ya no recibir nada de comida se irán retirando, poco a poco dejaras de sentirte dios, y una mota de tristeza invadirá tus adentros y te sentirás desprotegido, abandonado, los verás alejarse de ti, como si nunca te hubieran conocido, como si nunca hubieras sido un dador de confor en sus vidas, al final tan solo quedarán los cuervos, que estarán observándote y luego se miraran entre ellos y graznarán no tan ruidosamente como hace algunos instantes, y si pudieras saber lo que dicen entre ellos, te enterarías de lo siguiente... ... pobre tipo, ahora es que está llorando por los patos, cuando los patos siempre lo utilizaron, se lo advertimos, pero nunca nos entienden... ...
J. ALFREDO CISNEROS DE JESÚS -México-
Publicado en la revista Trinando 9
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