sábado, 30 de mayo de 2015

EL INVISIBLE VIENTO


El invisible viento,
todo lo azota
sin dejarse ver.
Alejándose lejos,
para que nadie
lo pueda
retener.
Su huella se ve
en los suelos,
cuando lo que arrastra
nos deja caer.
Entre miles de hojas
secas,
de un árbol viejo
que milenario es.
En el que infantiles
pisadas,
se borraron
y ya no se ven.
Pues todo
lo esparce el viento,
hacia un destino
sin conocer.

Ricardo Campos Urbaneja.

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